Las rutas de origen y destino son los caminos o trayectos que los productos siguen desde su punto de origen (donde se fabrican o almacenan) hasta su destino final (el cliente o punto de venta). Estas rutas son fundamentales en la logística y comercialización porque determinan el tiempo, los costos y la eficiencia del transporte.
Una buena planificación de rutas asegura que los productos lleguen de manera oportuna, reduciendo riesgos de retrasos y daños, y optimizando el uso de recursos.